Tras estar detenido diez días, este lunes liberaron al productor de televisión Marcelo Corazza. Está implicado en una aparente red de trata.
Hace diez días el productor de televisión y ganador de la primera edición de Gran Hermano argentina, Marcelo Corazza, quedaba detenido tras un allanamiento en su domicilio.
Este lunes fue liberado, pero quedó firme su procesamiento en la causa que investiga una aparente red de trata con fines de explotación sexual y corrupción de menores.
Por su parte, Francisco Rolando Angelotti, presunto líder de la red, Andrés Fernando Charpenet y Raúl Ignacio Mermet continúan detenidos tras ser procesados.
Las detenciones
El lunes 20 de marzo la División de Trata de Personas de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires realizó allanamientos en cinco lugares.
En la provincia de Buenos Aires allanaron tres domicilios en General Rodríguez y uno en el partido de Tigre. A la par, el quinto fue en Oberá, interior de Misiones.
Al día siguiente los cuatro detenidos fueron indagados por el juez Javier Sánchez Sarmiento, a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional n* 48.
Todos se negaron a responder preguntas.
En los allanamientos se secuestraron celulares, computadoras, discos externos, casettes VHS, pendrives y tablets.
La red captaría desde hace 20 años, sobre todo a menores entre 11 y 14 años en Oberá, para ser explotadxs en la provincia de Buenos Aires y Capital Federal.
El gran contexto de vulnerabilidad de sobrevivientes y las realidades socio-económicas del interior misionero, son claves para determinar el aprovechamiento de los procesados.
La causa
La acusación contra Angelotti, Charpenet, Corazza y Mermet es por conformar una organización destinada a reclutar menores y mayores de edad en situación de vulnerabilidad.
Valiéndose de la vulnerabilidad de las personas, sobre todo de menores, lxs habrían sometido a abusos sexuales y explotación sexual.
Y en la causa se agrega que “ya fuere por intercambio de dinero o por satisfacción personal o de terceros”.
Aparentemente Corazza pudo obtener la excarcelación, ya que sólo sería abusador y no parte de la captación de la red.
Cuestión que expone la liviandad con la que el sistema judicial trata este tipo de causas y considera que abusar de personas violentadas en una red de trata, no es grave cómo captar personas con fines de explotación sexual.
Ambos delitos son gravísimos y la Justicia debe proteger la integridad mental de quienes pudieron denunciar haber sobrevivido a la aparente red, quienes hoy ven que un denunciado obtuvo la libertad.
Más aún entendiendo que son acusados con la posibilidad de tener aparentes contactos, que les permitiría alguna protección.
La causa tomó notoriedad pública por la exposición de Corazza y la gran visibilización en los medios de comunicación. Si no fuera por esto, la red denunciada continuaría operando con impunidad.
Las fuentes judiciales nacionales consultadas explicaron que a Angelotti se le podría realizar una línea temporal como aparente líder de la red, que determinaría 20 años de accionar.
La Justicia no tendría dudas de que Corazza sería un abusador de menores captadxs, pero de igual forma obtuvo la libertad.
Lo más llamativo es que personal carcelario le habría manifestado al productor televisivo que él iba a salir de la cárcel, pero no así los otros tres procesados.
Todo el material de los teléfonos incautados ya se encuentran compilados en un disco rígido, a la espera de que el juez libere la orden a lxs investigadores y puedan trabajar sobre las pruebas.
Es importante destacar que no se puede hablar de “consumidores” en casos de trata. Las personas explotadas con fines sexuales no son objetos de consumo.
Justamente la explotación contra su voluntad remite a las palabras de abuso, violación o sometimiento, que se deben utilizar en la visibilización de estos casos.
