¿Vos dirías que una familia por ser de tres personas es chica? ¿De dos? ¿Tiene que ver el tamaño de una familia con el amor que puede haber en ella? ¿Designa su tamaño los valores que hay? Si, son preguntas poco habituales, sobre todo para lo que queremos contarte.
En Mega somos un equipo chico, pero eso no hace que nuestra voz sea irrelevante, no nos hace menos medio, no nos habilita a ser irresponsables, a comerciar nuestros valores. Por eso en todos estos años nos comportamos con coherencia a la hora de comunicar, nunca dejamos que el dinero, que lo partidario, que el odio nos desvíe de ese lugar sin embargo vemos como hay gente que se escuda en el lugar que ocupaba en el pasado, en no ser “relevante” políticamente, para justificar discursos de odio ¿Desde cuando la responsabilidad esta medida por el alcance? Creemos que va siendo claro lo que te queremos decir.
Durante este último tiempo muchas personas le dieron lugar, desde la bronca, a ideologías que son antidemocráticas, que reivindican períodos oscuros de nuestra historia, que con el discurso de un futuro utópico aprovechan para borrar un pasado doloroso e inhumano. Ese odio caló tan profundo que permitió que te olvides del costo que va a tener eso en tus abuelos, en tus familiares que trabajan en nuestro sistema público de salud, en nuestro sistema de seguridad, en empresas que dependen del comercio exterior para sostener sus puestos de trabajo, de tus amigos y amigas que estudian en universidades públicas. Dejamos que la bronca le dé poder a personas que no nos ven como personas sino como números, compradores y vendedores, que no saben lo que es ir a pedirle una herramienta a un vecino, compartir el wifi con los chicos del piso de abajo, que no consideran que a veces no importa la calidad del bien sino con quienes se comparte. Esos discursos habilitaron que se deshumanice al que piensa diferente, a desearle la muerte a personas por su identidad de género o incluso por condición económica.
Somos pocos, sabemos lo que es trabajar duro para sostener un proyecto incluso cuando comercialmente no se considera relevante, porque no todo es dinero, porque sostener la cultura, darle voz a quienes no tienen espacio en otros lugares no da plata, pero da la satisfacción de cuidar lo que nos hace ser uno de los paises mas respetados en materia artística y cultural.
Para las políticas liberales de ultraderecha Mega es una mala inversión, para muchas personas nuestro valor no se mide en dinero, a esas personas las invitamos a no acompañar un modelo que ataca nuestra cultura, que es deshumanizante y que atenta contra nuestros trabajos.
Y si no fuera suficiente, si el odio gana esta vez, vamos seguir acá igual que siempre. Luchando desde nuestro lugar por los derechos de todes, por una cultura de todes y con las puertas abiertas por si alguna vez alguien necesita un destornillador, usar el wifi un rato o un micrófono para levantar la voz.
