Otro fatídico marzo fue el de 1908, con el incendio de la fábrica Cotton en Nueva York, Estados Unidos. Se realizaba una marcha multitudinaria en las calles, pero las trabajadoras fueron encerradas en la fábrica. Al igual que las mujeres afuera, ellas querían mejores condiciones laborales haciendo una huelga dentro de su trabajo. El dueño cerró las puertas de la fábrica pero las mujeres no cesaron su pedido. Terminaron muertas 129 protestantes en un incendio dentro de la misma.
Se dice mucho sobre este día, pero lo principal a recalcar es que el 8M no es una celebración. Recordamos la importancia de la igualdad entre mujeres y hombres para reivindicar el reclamo de igualdad de derechos. En lo que va del 2023 solamente en Argentina ya se registraron 52 femicidios, 52 muertas por ser mujeres. Solamente son los registrados, imaginemos la cantidad que no lo están o las denuncias hechas sin efecto hasta hoy. Es una convicción de todo el año, pero hoy particularmente salimos a marchar, subimos a las redes y ayudamos a dar visibilidad al pedido.
No es un capricho ni una condescendencia, de feliz no hay nada. Podés empezar a estar presente con varias acciones sencillas. Deja de minimizar a las mujeres en sus puestos de trabajo y sacate esa idea de que por el género se «sabe» menos. Si querés ser parte, empezá frenando a tu amigo cuando acose a una chica por la calle o borrá esas fotos que te pasaron en el grupo sin consentimiento. Todavía hay mucho por hacer. «Feliz día» va a ser cuando estemos todas.
Valentina Correa Humeres